El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
El campo El Entrevero fue adquirido en 2011 por Maximiliano Alejandro Acosta, el entrerriano que fue testigo del casamiento de Leonardo Fariña, el valijero del rodete, con Karina Jelinek. La operación se concretó a través de una empresa que se atribuye al contador de Lázaro Báez y Acosta reconoció ante la justicia haber participado, pero aseguró que no cobró las comisiones que le prometieron.
De la Redacción de Página Judicial
Mientras en el sur argentino continúan los allanamientos en estancias de Lázaro Báez, la justicia uruguaya embargó el campo El Entrevero, en José Ignacio, en una causa por presunto lavado de dinero que se le sigue al empresario patagónico en el vecino país.
En su extensa declaración indagatoria ante la justicia argentina, el valijero Leonardo Fariña contó que El Entrevero fue comprado el 1 de agosto de 2011 en 16,5 millones de dólares. Esa operación se concretó a través de Traline SA, que presidía el empresario concordiense Maximiliano Alejandro Acosta, amigo de Fariña. Sin embargo, la escritura firmada por el escribano Adolfo Pittaluga Shaw establece que la venta se concretó en 14 millones de dólares. Los operadores judiciales, en cambio, creen que el campo de 152 hectáreas no valdría más de 4 millones, mientras que fuentes del sector inmobiliario estimaron que tendría un valor de mercado cercano a los 9 millones de dólares.
El embargo fue dispuesto por la jueza Adriana de los Santos luego de un pedido que efectuara la fiscal especializada en crimen organizado María de los Ángeles Camiño, según consignó el diario El País. Los medios uruguayos destacaron además que se trata de uno de los más cuantiosos de la historia del país.
¿Quien figura como comprador del campo? Maximiliano Alejandro Acosta, un empresario concordiense de 42 años. Fue el celestino entre su amigo Leonardo Fariña y la modelo Karina Jelinek y testigo de la boda. En Concordia es conocido como un empresario de la noche y se le atribuye la propiedad de al menos dos boliches: Cruz Diablo y Veleta. Hay quienes aseveran haberlo visto circular en momentos en un Mercedes Benz blanco, en otros en una Harley Davidson Edición Limitada, en un Audi negro y hasta en una Range Rover, según pudo reconstruir en su momento Página Judicial.
ACOSTA: "TRABAJADOR AUTÓNOMO"
Acosta figura inscripto en la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) como trabajador autónomo, con domicilio en Concordia y registra ingresos de hasta 15.000 pesos. Ante el fisco declara como su “actividad principal” la de realizar “operaciones financieras con recursos monetarios fuera del sistema bancario”. Así está inscripto en el organismo desde julio de 2009. Además, aparece como presidente de una empresa agropecuaria, Lofini SA, pero desde 1995 hasta 2008 no estuvo en un trabajo en relación de dependencia en el que durara más de dos años. Sin embargo, y pese a contar con domicilio en Concordia, no tiene ningún bien inscripto en la provincia.
La compra del campo El Entrevero se concretó a través de la sociedad Traline, que Acosta presidió desde el 23 de febrero de 2011. Según consignó el diario uruguayo El Observador, ese día, la sociedad anónima tenía un capital accionario de 76.000 dólares, pero un mes después, en marzo, aumentó a 14 millones, con los que compró el campo uruguayo.
Sin embargo, luego el contador Daniel Pérez Gadin –detenido en la cárcel de Ezeiza en el marco de la causa por lavado de dinero que lleva adelante el juez Sebastián Casanello y en la que también está involucrado Lázaro Báez– viajó a Punta del Este y reemplazó la escritura del campo El Entrevero que estaba a nombre del concordiense.
En cuanto a Acosta, dos meses después de concretar la compra de las 150 hectáreas en el Uruguay, el 22 de junio de 2011, fue desplazado de Traline y como presidente de la sociedad anónima quedó Oscar Osvaldo Guthux, que fue hasta 2010 gerente de finanzas de Valle Mitre, el grupo vinculado a Báez que administra el Hotel Alto Calafate, de la ex presidenta Cristina Fernández.
En 2013, cuando la operación quedó al descubierto en el programa Periodismo Para Todos,Acosta se presentó ante el fiscal Guillermo Marijuan y reconoció haber comprado el campo en Uruguay que quedó en manos del contador de Lázaro Báez, dijo que fue amenazado y pidió protección para su familia.
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