La joven Gisela López, que estaba desaparecida desde hacía casi 20 días, fue encontrada muerta y con claros signos de haber sido asesinada, en proximidades de su vivienda, en la localidad de Santa Elena.
La chica, de 18 años, era buscada intensamente por personal policial, tanto en Entre Ríos como en provincias vecinas. Su cuerpo mutilado, estaba solamente a escasa distancia de su vivienda, oculto, de acuerdo a lo indicado. Según trascendió, el cuerpo fue hallado por un ciudadano que pasaba a caballo.El cuerpo sin vida fue hallado en una zona de monte que ya había sido recorrida por los perros rastreadores, por lo que se sospecha que no fue detectado por causa de la lluvia. El cadáver hallado data de hace varios días, lo que indicaría que fue asesinada el mismo día de la desaparición, hace casi 20 días, publicó Análisis.
La ropa que llevaba el cuerpo es coincidente con la que vestía la joven al momento de ser denunciada su desaparición.
La última vez que vieron a Gisela fue a unos 500 metros de su casa en Santa Elena.
Personal de Criminalística y el propio jefe de la Policía, Gustavo Maslein, se dirigían a la zona.
El hallazgo
En declaraciones a En el dos mil también (FM Litoral) que reprodujo Uno de Paraná, el periodista de Santa Elena Carlos Furman dijo que la chica apareció a las 15.30 aproximadamente, a unos 1.000 metros del barrio XX Viviendas; a unos 30 metros de la ruta de acceso a la ciudad. La zona fue rastrillada cuando se la buscaba.
"Evidentemente dejaron el cuerpo recientemente. La casa más cercana al lugar donde apareció está a 50 metros", indicó Furman.
"La encontró un ciudadano común que pasó por el lugar y la vio, no es un sitio complicado para acceder", agregó. "El pueblo está conmocionado. Hay desorientación en cuanto a los móviles y participantes", dijo.
Fuentes consultadas por Uno indicaron que quien la vio alguien que pasa allí diariamente a caballo.
El intendente Silvio Moreira, por su parte, remarcó: "Estamos sorprendidos y golpeados. Teníamos la esperanza de encontrarla con vida. Queríamos que se resolviera de otra manera, pero fue así del peor modo".
"En Santa Elena había fe en que apareciera viva; que había salido de su casa por sus medios y que volvería en cualquier momento. En el pueblo estamos muy mal", acotó Moreira.
"Apareció a unos 400 metros de su casa, en la zona hay un camino donde la gente sale a caminar y mucha gente vive en el barrio", amplió.
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