El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
La iniciativa está destinada a hombres con antecedentes en violencia hacia las mujeres, que deberán ser derivados desde el sistema judicial.
Tuvo entrada en la Cámara Baja de la provincia una iniciativa propone crear un “Programa de reeducación emocional y responsabilidad para hombres judicializados por violencia de género”
Está destinado a mayores de 18 años con antecedentes en violencia hacia las mujeres, quienes deberán ser derivados desde el sistema judicial.
El objeto del proyecto –cuyo autor es el diputado Sergio Kneeteman (Cambiemos)– es “fijar un marco preventivo-asistencial para situaciones de violencia y la finalidad de asumir sus psicopatologías, modificar conductas y prevenir futuros actos violentos hacia la mujer”. El Programa se dictará en forma gratuita a varones mayores de 18 años de edad residentes en la provincia, que sean destinatarios de medidas cautelares dictadas por el juez en el marco de las leyes vigentes, en razón de haber ejercido cualquier forma de violencia hacia la mujer, por derivación judicial, publicó El Diario.
Estará a cargo de un equipo multidisciplinario especializado en la temática de la violencia de género, conformado por un psicólogo, un psiquiatra, un trabajador social y un terapista ocupacional.
La iniciativa prevé que el Programa tenga una parte educativa, una de reflexión y una de terapia. Las técnicas y estrategias conductuales se abordarán a través de terapias personales y grupales, talleres de reflexión y talleres de educación.
Los talleres con varones agresores estarán a exclusivo cargo de facilitadores previamente capacitados y entrenados para su ejecución.
Los tratamientos previstos tendrán una duración de entre 6 a 12 meses, con asistencia semanal a las actividades indicadas en el Programa. Cada grupo de taller, tendrá como máximo veinte asistentes.
El equipo multidisciplinario realizará una evaluación previa del o los hechos objeto de la denuncia judicial, la situación actual y del presunto agresor, desde sus inicios, los avances registrados, el grado de compromiso asumido y los resultados obtenidos.
Bajo esos parámetros decidirá si se halla en condiciones para su ingreso al Programa.
Posteriormente elaborará informes periódicos de la situación y la evaluación de riesgo de reincidencia del agresor, los que podrán ser agregados al expediente judicial e informados al juez y a quien haya sido víctima de violencia. El juez podrá requerir informes, que deberán ser remitidos a la causa en el plazo de cinco días de solicitado.
Se trata de una ley complementaria de la Ley Nº 9198 sobre “Prevención de la Violencia Familiar”. El proyecto establece que la autoridad de aplicación sea el Ministerio de Desarrollo Social.
De acuerdo al texto del proyecto, el desarrollo del Programa incluirá los siguientes procesos:
a) Reflexión sobre la manera de posicionarse frente a la mujer.
b) Conciencia y sensibilización de la cultura machista del entorno.
c) Conciencia del reconocimiento de las causas y condiciones de la violencia.
d) Reflexión y asunción de la equidad e igualdad entre varones y mujeres, la masculinidad y los abusos de poder, la violencia contra la mujer, niños, niñas y las conductas de control.
e) Elaboración del proyecto personal basado en nuevas pautas de convivencia, que tengan como eje el respeto a las personas.
f) Control de la ira, y pautas de reconocimiento, detección y estrategias de freno.
g) Realización de terapia personal y grupal.
h) Detección de recaídas a través de evaluaciones periódicas sobre la evolución del agresor.
i) Elaboración de estadísticas de resultados y tasas de reincidencia.
j) Realización de informes que podrán ser agregados al expediente personal del asistente al Programa.
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