El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
Nahir Galarza recibió la máxima pena del sistema jurídico. Los jueces aplicaron letra por letra el Código Penal. No tuvieron en cuenta ningún otro factor como la edad, la impericia y el tipo de relación con su víctima. Estará en la cárcel durante 35 años. ¿Es necesario tanto tiempo para que Nahir aprenda que no debe matar a los demás? La Argentina adhirió al Estatuto de Roma de 1998, que establece un máximo de 30 años, para los delitos más graves, pero los jueces ni siquiera lo consideran.
Por ANÍBAL GALLAY
Nahir Galarza recibió la máxima pena del sistema jurídico argentino: prisión perpetua. Esa pena corresponde a los homicidas con un plus por el agravamiento. El artículo 79 del Código Penal establece entre 8 y 25 años para el homicidio, pero en el artículo siguiente están las agravantes. Entre ellas el vínculo. Es decir que víctima y victimario tuvieron alguna relación.
La palabra “perpetua” suele dar lugar a equívocos. El diccionario dirá que se trata de una pena sin fin o que finaliza con la muerte del condenado. Pero el sistema judicial no lo estima de esa manera. En algún momento de la historia el término perpetua implicaba que el condenado debía pasar como mínimo 20 años de encierro. Desde las leyes llamadas “Blumberg” se extendió a 35 años.
El ingeniero Blumberg logró que se agravaran las penas. Ello no implicó una disminución de delitos, satisfizo a una clase media que siempre reclamó (y sigue reclamando) más dureza. Algunos medios siguen hablando de “cadena perpetua” que viene de los tiempos en que los presos eran engrillados y sujetos a una bola de hierro.
Los jueces están muy atentos a la opinión pública. En este caso quiere decir que están atentos a lo que dicen, opinan y pontifican periodistas televisivos más o menos conocidos e influyentes.
Nahir Galarza
Nahir Galarza mató a su novio de dos balazos. Es un delito muy grave, y tanto que los jueces decidieron aplicar la ley en toda la letra: prisión perpetua, porque el Código Penal así lo indica.
El abogado de Nahir Galarza seguramente presentará un recurso de casación. Ello implica una revisión que queda en manos de la Cámara de Casación Penal con sede en Paraná, Los jueces verán si los pruebas han sido convenientemente valoradas, o si han sido ignoradas y otras cuestiones.
Hay algunos elementos que no fueron considerados y entre ellos pueden mencionarse:
-no tener cuenta que la relación era violenta de ambas partes.
-Nahír no es una delincuente profesional
-Nahír es una chica de tan solo 19 años.
-Nahír tiene una situación de inexperiencia vital que pudo impedir o disminuir la percepción de la gravedad de sus actos.
No considerar que la prisión perpetua resulta excesiva, cruel y degradante, en este caso concreto.
-El Estatuto de Roma (que es ley en Argentina) indica que no puede haber penas mayores a los 30 años.
Prisión perpetua
En la Argentina la pena tiene como objetivo que el autor de un delito pueda resocializarse, más allá que la gente en general opine que debe pudrirse en la cárcel y sufra todo lo posible.
Nahir Galarza, tal como están las cosas, deberá estar en la cárcel hasta los 54 años. En verdad sería mucho más saludable que la fusilaran o la condenaran a la silla eléctrica. Los 35 años de cárcel equivalen a una larguísima tortura.
¿Son necesarios 35 años para que Nahír aprenda que no se debe matar a los demás? Desde ya que no, pero algún criterio generalizado pretende que la homicida debe podrirse en la cárcel. Son criterios medievales, pero vigentes.
El Estatuto de Roma (de las Naciones Unidas) estableció que la máxima pena para los delitos de lesa humanidad, no pueden superar los 30 años de prisión. Se trata de delitos gravísimos como genocidio, exterminio y otros. La Argentina suscribió dicho estatuto y es ley. Nahir Galarza cometió un delito más grave que el genocidio, según los jueces.
Un criterio ineludible para los jueves es la razonabilidad de la pena, que no pueden ser degradante, cruel, ni excesiva teniendo en cuenta el principio constitucional: las penas serán para seguridad y no para castigo.
rubengallay@hotmail.com
Esta nota es posible gracias al aporte de nuestros lectoresSumate a la comunidad El Miércoles mediante un aporte económico mensual para que podamos seguir haciendo periodismo libre, cooperativo, sin condicionantes y autogestivo.
|
