El 7 de enero de 2014 el “Puente de Fierro” se derrumbó y cayó con un camión municipal que transportaba personas que trabajaban en la recolección y reciclado de residuos en la planta de Talita. Como consecuencia de ese impacto falleció Rocío Lorena Quintero, trabajadora de las Cooperativas Sociales y vecina del barrio La Tablada.
Se llamaba Rocío Lorena Quintero. Había cumplió 30 años el 17 de diciembre de 2013. Trabajaba –en condiciones de precarización total– en la planta de reciclaje que alguna vez la gestión del PJ anterior presentó como “modelo”. Vivía en un humilde rancho en el barrio La Tablada con su hijo de 13 años. Las condiciones inhumanas en las que se realiza el trabajo de separación de residuos en la planta de Talita –con la desidia cómplice del Estado, la impunidad del empresario privado y ante la indiferencia de la sociedad– le costaron la vida.
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