La Delegación del Tribunal Internacional de Derechos de la Naturaleza visitó las provincias argentinas de Neuquén y Río Negro, con el fin de relevar los impactos ambientales y en los derechos humanos producto de la expansión de la industria petrolífera extractiva en la región. Luego de un recorrido por la cuenca de Vaca Muerta, este lunes presentó sus resultados provisionales. Los jueces y juezas convocados por entidades ambientales establecieron que “el fracking conduce al colapso del agua en tanto origen de la vida, lo que provoca tremendas destrucciones de los ecosistemas”. El informe también será dado a conocer en la Cámara de Diputados de la Nación.
Las muy graves afectaciones a la Naturaleza y a la vida de las comunidades en la zona de Vaca Muerta fueron constatadas por los miembros de la delegación de jueces del Tribunal Internacional de los Derechos de la Naturaleza que desde el 29 de marzo se encuentran de recorrida por la Patagonia argentina. Esta misión llegó al país invitada por parte de la Confederación Mapuche y Fuerzas Vivas de Neuquén, quienes participaron en la sesión internacional de dicho Tribunal en diciembre del año 2019.
Un informe de avance de la incursión por la zona fue dado a conocer este 3 de abril en la sede de la Universidad Nacional del Comahue. Las conclusiones preliminares fueron basadas en el relevamiento de testimonios, informes y documentos que registran “daños masivos contra los derechos humanos y el ambiente, provocados por el megaproyecto Vaca Muerta”, se apuntó en un comunicado oficial.
“La búsqueda del desarrollo y el progreso a raíz de la explotación ambiental solo traen pobreza. Lo que el Tribunal vio en estos días es un destrozo del territorio con profundas afectaciones a las comunidades. Además, como es conocido, y tal como se vive en el mencionado territorio, el extractivismo viene acompañado de violencia y corrupción, que no son una consecuencia de dichas actividades, sino que resultan incluso una condición necesaria para poder cristalizarlos”, se indicó como parte de las impresiones de las visitas a los territorios.
Vital elemento
En relación al agua, se resaltó que “el daño es inmenso”. Y que “no hay fracking posible sin la explotación irresponsable de inconmensurables cantidades del agua. El fracking conduce al colapso del agua en tanto origen de la vida, lo que provoca tremendas destrucciones de los ecosistemas. El impacto sobre el agua se reproduce en otros ámbitos, como en el suelo; allí se constataron los efectos de los recurrentes sismos provocados por la fractura hidráulica en el subsuelo, que obligaron a muchos vecinos de las regiones afectadas a desplazarse de sus hogares”, se describió.
Como problemática deriva se indicó que “un punto crucial es la falta de agua para las comunidades indígenas y también para el resto de la población de la zona, la que, inclusive, tal como sucede en Añelo, no tiene acceso al agua potable y sufre también las afectaciones provocadas por la contaminación del aire, por los ruidos, y por la falta de protección frente a tantos destrozos ambientales. Asimismo, quienes trabajan en las actividades hidrocarburíferas -petróleo y gas- también resultan víctimas a raíz del no cumplimiento de las normas de protección ambiental en el desempeño de sus trabajos. Todo lo anterior provoca graves afectaciones a la salud de los seres humanos y de la vida toda, desde malformaciones genéticas, cáncer, enfermedades de los pulmones, y metales pesados en la sangre, hasta crecientes padecimientos psicológicos”.
Vida
Respecto a la visa silvestre del lugar, la delegación del Tribunal Internacional planteó que a raíz de lo descripto por el avance de la industria petrolífera, en la zona también se puede apreciar una creciente desaparición de animales silvestres.
Asimismo, que la intensiva ocupación del territorio por parte de las empresas extractivas ha generado profundos impactos en las comunidades locales, especialmente en las comunidades mapuches. “El avance de las locaciones petroleras ha llevado a la criminalización de estas comunidades y ha afectado su forma de vida, así como también ha causado la pérdida de superficie cultivada en zonas productivas del Alto Valle de Río Negro y Neuquén. Es más, los mapuches no fueron consultados, pese a que él país ratificó el Convenio 169 de la OIT que establece la obligatoriedad de la consulta libre e informada y la necesidad del consentimiento de los pueblos originarios. No sólo eso, han sido víctimas de otras múltiples formas de violencia. Incluso se trata de negar su presencia ancestral en dichos territorios”, se recordó.
Se observó que otra constante en este tipo de actividades, tal como se conoció durante la visita, es “el irrespeto permanente a las normas ambientales y de protección de los derechos humanos. La desidia de las autoridades es permanente”. En este caso se puso como ejemplo a Plaza Huincul, donde existe un depósito de desechos tóxicos de la actividad petrolera totalmente abandonado.
“No sólo la Naturaleza resulta golpeada por estas actividades, sino los mismos seres humanos: de especial atención por parte de la misión fueron los problemas permanentes que aquejan a defensores y defensoras de la Naturaleza”.
A los 10 años de la firma un convenio entre la multinacional Chevron y la empresa estatal de energía YPF para la exploración y explotación de combustible no convencional en la cuenca neuquina de Vaca Muerta, la delegación del Tribunal Internacional de los Derechos de la Naturaleza expresó especial preocupación en cuanto “es el momento de reflexionar sobre lo que esto está provocando. Las promesas bajo las cuales se impuso el modelo en ese momento, y que hoy se continúa profundizando, siguen pendientes. No sólo eso: tal como van las cosas, es indudable que las destrucciones van en aumento. Por lo tanto, la misión del Tribunal, que presentará un informe de su visita, anticipa la necesidad de construir estrategias de transición post-extractivista”.
Estas cuestiones fueron presentadas de forma preliminar en una mesa redonda en la Universidad Nacional del Comahue y también discutidas con el gobernador de la provincia de Neuquén. En tanto este martes a las 10 de la mañana los resultados provisionales serán presentados por la delegación en una reunión que tendrá lugar en la Cámara de Diputados/as de la Nación Argentina.
La visita in situ fue organizada por el Tribunal Internacional de Derechos de la Naturaleza, convocado por la Asociación Argentina de Abogados/as Ambientalistas (AAdeAA) y el Colectivo de Acción por la Justicia Ecosocial (CAJE), la Alianza Global por los Derechos de la Naturaleza (GARN) y el Colectivo Ecofeminista MIRÁ. Los anfitriones de la visita fueron la Confederación Mapuche de Neuquén, el Observatorio Petrolero del Sur y la Asamblea por los Derechos Humanos de Neuquén.
Jurados
El Tribunal Internacional de los Derechos de la Naturaleza es una institución internacional creada por ciudadanos para investigar y dar a conocer las violaciones de los derechos de la Naturaleza y los de sus defensores y defensores. Los veredictos éticos del Tribunal podrían proporcionar una herramienta necesaria en la lucha por la justicia ambiental. El Tribunal ha conocido casos en Ecuador, Perú, Francia, España, Inglaterra, Alemania, los Balcanes, Guyana Francesa, Brasil, Canadá, fracking en Estados Unidos, Argentina, Chile, Bolivia, Australia, y México y contra empresas petroleras como Total, Chevron Texaco, Shell, British Petroleum y empresas mineras como Newmont Mining Corporation, ECSA, Vale, entre otras.
Fuente: ERA VERDE
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