Tras 23 años sin actividad como hotel, la torre ubicada sobre la Terminal de Ómnibus será puesta en valor integralmente. Allí funcionarán dependencias municipales y se realizarán actividades abiertas de coworking.
Anunciaron que la Municipalidad recuperará integralmente el edificio del ex Hotel “Francisco Ramírez”, ubicado sobre la Terminal de Ómnibus. El objetivo es transformarlo en un edificio donde se desarrollen funciones de la administración municipal, además del uso común de la ciudadanía mediante actividades tales como coworking.
La primera etapa consistirá en la limpieza interior del edificio, impermeabilización de cubiertas, limpieza de fachada y extracción del ascensor original. Para estos trabajos se llama a licitación pública, debiendo las empresas interesadas adquirir el pliego de condiciones hasta el 26 de marzo a las 10.
Detalles de la recuperación
Se aprovechará la estructura de hormigón existente y el cerramiento de mampostería exterior de la torre, recuperando las cinco plantas, el salón del sexto piso, la terraza, la planta baja, el subsuelo y las fachadas. Como primer paso, se intervendrán todas las ventanas, vidrios y persianas. En todos los pisos se demolerán los tabiques de mampostería internos, además de los baños de cada habitación. Esto permitirá configurar en cada piso plantas libres, dando flexibilidad para las actividades que allí se desarrollarán.
Serán impermeabilizadas las losas superiores y el piso del subsuelo, y se retirará el ascensor existente.
Al finalizar esta primera etapa de obra, el edificio quedará preparado para futuras intervenciones que facilitarán el trabajo de instalaciones de agua, cloacas, instalación eléctrica, pisos y terminaciones.
Adecuación al presente
En la torre funcionó el hotel desde 1975 hasta 1998. Con características funcionales para servicios de hotel, el edificio quedó obsoleto tanto en los espacios interiores como en la escalera, habitaciones y sanitarios. Actualmente se encuentra en buen estado general aunque el paso del tiempo provocó filtraciones roturas en aberturas, cielorrasos desprendidos e instalaciones caducas. Los sistemas contra incendios y de calefacción también se encuentran obsoletos.
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