Aprovechando la excusa de la caída de pauta oficial, el Grupo de los hermanos Olmos vinculado a la UOM de Antonio Caló y con estrechas relaciones con el kirchnerismo, realizó a principio de año despidos de periodistas, personal técnico y administrativo en los medios de comunicación que dominan, entre ellos el canal Crónica. El periodista uruguayense, Carlos Ferreyra, es uno de los que formó parte de esa lista del ajuste. Mientras se encuentra en las instancias legales para “arreglar” su indemnización aceptó dialogar con El Miércoles Digital para contar cómo se manejó desde adentro en la última década uno de los medios informativos capitalinos más influyentes del país. Pese a la certeza de las razones económicas cree que en su caso se aprovechó la ocasión para cortar reclamos gremiales entre otras circunstancias.
Por JORGE RUBÉN DÍAZ de EL MIÉRCOLES DIGITAL
Para quienes no lo ubican, Carlos Ferreyra se fue a trabajar a Buenos Aires al canal Crónica en diciembre de 2002, siempre en el rol de notero-movilero y a veces presentando noticias en el “piso” en horarios de trasnoche.
Mate de por medio en el estudio jurídico de su hermano Federico Ferreyra, ubicado en la planta alta de la casa paterna a pocas cuadras de la cancha de Gimnasia, atiende a este cronista en una de sus visitas a La Histórica.
Rec al grabador y empieza el relato de su despido: “Fue el 26 de febrero, a esa fecha no me la voy a olvidar nunca. Me llaman para decirme ‘Ferreyra ¿se puede presentar el viernes a las 13?´, y me dan una dirección que no es la habitual del trabajo; la cita fue en el diario porque al canal lo compró la misma gente que en su momento compró el diario Crónica, el grupo Olmos. Nos reúnen a doce personas, la mayoría jefes, junto a nosotros estaba el contador de la empresa, habla Raúl Olmos y dice `tendremos problemas económicos porque el gobierno (de Mauricio Macri) ya nos anunció que no brindará la pauta publicitaria que nos daba el gobierno anterior, además tenemos deudas de cargas sociales que no nos dan más tiempo para pagarlas, eso nos obliga a reducir gastos en todo sentido y uno de ellos es el despido de ustedes, los elegimos por ser los sueldos más altos´. Entre nosotros estaban Pablo Pla y Diego Ricciardi, dos periodistas que tenían muchísima más antigüedad que yo y tenían mucha más actividad en el canal, sobre todo frente a cámara. También fue despedido el que armó el canal, así como te lo digo, del que puso la primera tuerca del canal, el señor Zaninni; el jefe de editores, Néstor Piñeyro y diferentes jefes de sectores que los conocía de vista pero no se los nombres, me los enteré allí porque la parte donde estaba yo, que era Redacción, tenía poco vínculo con el sector técnico que se encarga de la salida al aire del canal. Sobre esa reunión lo único que se pudo saber es que se iba a pagar la indemnización como corresponde, en principio seguimos negociando”.
-¿Por qué crees que te despidieron?, no van a solucionar los problemas económicos despidiendo a 12 personas.
-¿Sabés lo que pensé?, principalmente tuve buena relación con todo el mundo, y en un momento ocurrió algo complicado para el empleado, había dos cabezas que mandaban: la administración nueva y la administración vieja; la primera cuyas caras visibles eran Hugo Ferrer –un periodista conocido- y Jorge Álvarez; y a su vez Rubén Molina que era el viejo director, que de alguna manera representaba los intereses de García. Los dos daban las órdenes, yo acataba las órdenes de cualquiera de los dos pero si debía hablar algo para mí –cambios de turnos o de francos- lo hacía con Rubén (Molina), porque Ferrer nunca se presentó como nuevo jefe. De hecho una vez se hizo una asamblea pidiendo que se aclare la situación de dos cabezas mandando porque a veces las órdenes eran contradictorias. Luego de esa asamblea a Molina lo echan con la excusa de utilizar material del canal para beneficio propio, en realidad tenía un móvil que trabajó para la campaña de (Sergio) Massa, por ahí venía la cosa. Este grupo llegó a comprar medios a través del kirchnerismo. Entonces había contradicciones políticas y de órdenes dentro del canal. Toda esa situación más haber sido delegado hizo una suma, porque a las empresas no les gusta los tipos activos gremialmente. En definitiva el grupo se queda con todo a partir del momento del despido de Molina en octubre- noviembre de 2015.
UN GIGANTE QUE PISA FUERTE…PERO CON PLATA DEL ESTADO
El canal Crónica –fundado por Héctor Ricardo García- es un gigante donde trabajan aproximada unas 300 personas, pero que al pasar a manos del grupo Olmos el conglomerado mediático se le deben sumar el diario Crónica, el diario Bae, la productora Underground, más medios como el Atlántico de Mar del Plata. Medios que contaron con fuerte respaldo de jugosas pautas del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner; por estos días el matutino Bae corre serio riesgo en dejar de ser impreso.
Ferreyra contó lo que sabe: “Hacia un tiempo –en referencia al grupo Olmos- que dirigían absolutamente todo porque hasta un cierto tiempo eran socios de García. Hay cuestiones que como empleados nosotros no conocemos pero nos enteramos por otros medios u off the records, que García tenía deudas fiscales y de hecho estuvo detenido y luego sobreseído por causas que tenían que ver con deudas fiscales, al parecer hubo negociaciones para que este grupo llegue a administrar el canal y poco a poco se lo fueron quedando por ciertos compromisos que debía cumplir García y no lo hizo. Está claro que la plata siempre la puso el grupo Olmos, caso contrario no se podrían quedar con el canal, nadie se queda con algo que no es suyo, y más de García con toda su experiencia. Aún lo dejan entrar, aunque dicen Los Olmos que está haciendo un nuevo canal y que lo está armando en el mismo edificio. Puede ser cierto porque a todos sus medios los ha terminado explosivamente como lo hizo con la revista `Así es Boca´, como el diario, tuvo teatros y otras cosas”.
Para más datos el grupo Olmos, cuya cara visible es Raúl Olmos, está estrechamente vinculada a la UOM, y su socio es Alejandro Olmos, son empresarios mendocinos que vienen del manejo de empresas prepagas de salud.
LEY DE MEDIOS, APRIETES Y MANEJOS EMPRESARIALES
-¿Cómo influyó en ustedes en un medio popular como Crónica la nueva ley de medios en su momento?
-En nosotros no influyó en nada, para nada. De todos modos creo que fue para mejor, si, es que se generaron más medios y había más trabajo, pero esos medios ahora están desapareciendo porque no tienen sustento económico. Pese a que el objetivo de esa ley era desmonopolizar todo sigue siendo exactamente igual. Hay que reconocerle el mérito al grupo Clarín que no es sólo un grupo concentrado, es un grupo que además trabaja muy bien, informa bien, capacita a sus periodistas, invierte, tiene una buena imagen en el sentido técnico. No es sólo es agrupar medios, porque el grupo Olmos también lo hizo y no los ve ni escucha nadie.
-¿Cómo ves el manejo actual de la pantalla de Crónica?
- El hecho de dar las explicaciones de que nos echan por las cargas sociales o de las pautas publicitarias les viene como anillo al dedo para culpar al nuevo gobierno. Si ves Crónica o el diario se ve como resaltan `Más despidos, más desocupados´, eso demuestra que están bien de la vereda de enfrente, al contrario de antes cuando eran oficialistas. Esto les sirve para negociar pautas publicitarias o hacer negocios que siempre hay en ese lugar de manejo. El canal se estaba cayendo periodísticamente, y ahora -desde mi punto de vista- está mejorando porque están diciendo lo que está mal, pero que antes no lo hacían, ¿qué pasa? ahora muestran los problemas, pero antes también había problemas. Nuestro trabajo siempre fue el mismo, ir a un lugar y contar lo que pasaba o hacer notas. Pero durante un tiempo no se cubrían los cortes de luz, ahora se cubren todos los cortes de luz (se ríe).
-Siempre se dijo que Crónica abusaba de fabular sobre determinadas notas como la recordada en el 2001 de los “Guerrilleros truchos en Concordia”, que además de rating tenía como objetivo apretar al Gobierno de entonces (La Alianza) con el cobro de pautas oficiales atrasadas.
-En ese caso específico no estaba en el canal, pero si vi y tengo presente que una vez a uno de los directores se le rompió el tren delantero de su auto porque agarró un pozo de la calle, entonces mandó hacer un informe y relevamiento con todos los pozos de la ciudad.
NO VOLVERÍA AL CANAL PERO SI A SU CIUDAD
Locutor nacional, periodista deportivo, como tenía horarios nocturnos en el canal le daba tiempo para cursar y estudiar la carrera de Abogacía, “hice mi propia liquidación, así que estoy negociando porque a ellos (la empresa) les da un número bastante menor”. No descarta ir a las instancias judiciales de ser necesario, “por suerte tengo una hermano acá (Federico) que también es abogado y a veces me pasa material de casos que no puede atenderlos solo para ayudarlo, eso suma. Me recibí en el 2012, no llevo tres años de matriculado porque cuesta armarse” confesó.
- Si te ofrecen volver a Crónica en ese marco de negociación ¿agarrás?
-Ya tuve esa posibilidad y dije que no. Antes que me despidan había intentado también que me cambiaran los días francos –tenía jueves y viernes- y los horarios y no lo había logrado. Entonces vi este despido también como la posibilidad de trabajar de manera independiente y llevar una vida más normal, de lunes a viernes y de día.
-¿Y si García -que está armando un nuevo canal- te llama?
-Estaría bueno, uno se sentiría muy bien, sería un reconocimiento. Con Los Olmos es difícil porque hay que evaluar la situación de los (ex) compañeros que la están pasando mal. Si uno negocia algo con los mismos que ellos están peleando para mejorar la situación no sería éticamente correcto.
-¿Hablabas con García?
-No, nunca lo hice. Ahora no puede hablar, tiene muchos problemas (de salud), y se maneja por escrito. El diálogo con él siempre fue a través de sus intermediarios. Yo llegué al canal de la mano de Alejandro Benítez (también uruguayense), que sigue trabajando allí y es delegado de los locutores.
- ¿Te vas a quedar en Buenos Aires?
- Tengo ganas de venirme pero tengo mi hija mayor allá. Y además está la familia de mi mujer.
-¿No surgieron posibilidades de trabajar en otros medios capitalinos?
-Y…es complicado. El único medio que está bien es TN porque se autofinancia, los demás en su mayoría se financiaban en su mayoría por la Nación, provincia y la ciudad: CN 23 dependía exclusivamente de la pauta, no tenía un ingreso privado; CN5 tiene algo de privados y se puede mantener. Ahora…(piensa y se ríe) con tantos conflictos lo mejor que te puede pasar es ser abogado.
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