Luego de concluida la etapa de las declaraciones de testigos e incorporaciones de pruebas, como cierre de esta maratónica semana en doble turno, cuatro de los imputados brindaron su testimonio.
Informe: JORGE RUBÉN DÍAZ de EL MIÉRCOLES DIGITAL
Colaboración: M.B y M.R
Ellos fueron el oficial Celestino Borges; el sargento Juan José Asín; el también oficial Gabriel José Antonio Arias; y el comisario Eloy Rafael Fernández (ver nota: Cruce de acusaciones…); en tanto, el médico Jorge Rafael Valdez lo había hecho en la apertura del juicio (Ver nota: Con las declaraciones del médico...). El resto de los imputados decidió no declarar. Ajustándose al derecho los policías que dieron su versión no aceptaron preguntas de la Fiscalía ni de la Querella, sí la de sus abogados defensores.
A excepción de Fernández -quien no estuvo en el lugar de los hechos- el resto señaló a Jorge López como el responsable de arrojar una piedra que hirió al sargento Juan Asín. Ninguno se refirió a malos tratos ni golpiza contra López.
Aproximadamente, cada uno de ellos expuso entre 12 y 16 minutos. Estas fueron sus principales palabras:
CELESTINO BORGES
Expuso que estaba de recorrido con Agrelo. Cuando llegaron, observaron el móvil de la Segunda “forcejeando con dos femeninas y masculinos”. “Recibimos piedrazos, aunque no me impactaron a mí”. Reconoció que se hizo un disparo persuasivo. “Una persona robusta tiró un piedrazo que impactó en Asín y éste disparó con un arma. Le pedí a Arias que identifique al que tiró”, siguió.
Ingresaron a la casa de Oscar López con Arias y Ocampo. Sin mencionar el nombre de Jorge López, dijo que forcejeó con él. “Lo esposamos y se siguió resistiendo. Finalmente Arias lo trasladó a la Jefatura Departamental”. “Lo encontré a Eloy Fernández y me dijo que vaya a Comisaría Segunda hacer la denuncia correspondiente: Fui a la Sala de Comando y le comuniqué a Peralta Iguini. Lo mismo hizo Arias. Fui a la Segunda con Arias y después lo hizo Asín”, explicó.
Luego, opinó: “Fue una situación no normal, no común. Con el diario de mañana puedo decir ‘pude hacer esto o aquello’. Me sorprende lo de la madre del bebé que intentó entorpecer el procedimiento para detener a una persona que cometió un delito, utilizando su bebé de escudo”, disparó, en referencia a Camila Villaba.
Después indicó que “la fiscal Melisa Ríos me exhibió filmaciones de Jorge López que yo ni sabía que existían”.
JUAN JOSÉ ASÍN
Señaló que esa madrugada llevaron dos detenidos de la Comisaría Primera al Juzgado y que, mientras su hermano -que estaba en el móvil con él- bajó a llevarlos al edificio tribunalicio, escuchó un llamado en jurisdicción de la Segunda. “El llamado de Blanc era desesperado. Decidí ir. Al llegar ví que Ortmann forcejea con las femeninas, escuché un piedrazo sobre la camioneta, no sé si en la llanta o en la caja. Decidí cubrir el perímetro y vi que salía corriendo Jorge López, juntaba un ladrillo, lo lanzaba y me pegaba en la nuca, disparé con la anti-tumulto. Él se metió en la casa. (Federico) Agrelo me llevó a la camioneta. Llegaron los móviles de apoyo, les di las características: que era robusto y de ropa oscura. Después salió Borges con los detenidos y otro oficial, creo que Ocampo. Me preguntó Borges cómo estaba y si podía manejar para llevar al detenido, le dije que sí pero que vaya otro con el detenido atrás. Fue Mosqueda. Fui despacio porque seguía un poco mareado. Mosqueda bajó al detenido. La cabo Pérez me llevó a Logística y de ahí a Sanidad. El doctor me dijo que la herida necesitaba sutura. Lo busqué a mi hermano para ir al Hospital y, cuando queríamos salir, la camioneta de Infantería obstaculizaba la salida. Luego fuimos al Hospital, donde me pusieron unos puntos. Después fuimos a la Segunda a hacer la denuncia. No me explayé en la declaración allí porque me quería ir a descansar y utilizar el parte de enfermo que me habían dado”.
Luego indicó que cuando los hechos tomaron estado público quiso declarar en Fiscalía pero el entonces abogado defensor le aconsejó no hacerlo. Recién lo hizo cuando Rubén Pagliotto asumió su defensa.
GABRIEL JOSÉ ANTONIO ARIAS
Dijo que estaba de guardia en la Tercera cuando escuchó por la radiofrecuencia de la Policía que en determinado lugar “una femenina quería ser violentada sexualmente por un masculino”. Fueron hacia allí Javier Aquino, Leonardo José Povoroznik y el cabo Carlos Toso.
Cuando llegaron a la zona vio dos camionetas policiales. “Había un ambiente complicado, la gente insultando. Povoroznik efectuó un disparo al suelo. A metros vi a Asín tomándose la cabeza. Vi a un sujeto que se venía con actitud agresiva, era robusto. Me quizo tomar de la mano. Forcejeamos con Povoroznik logrando reducirlo, lo levantamos y sentí una molestia en una pierna. Le indiqué a Toso que retire al detenido, lo subieron al móvil 447 y le indiqué que lo lleven a Jefatura”.
Y prosiguió: “Povoroznik intentó detener a un masculino que venía hacia él, que después nos enteramos que era Sánchez. Lo llevamos al patrullero donde estaba Asín, quien tenía sangre. Él nos dio la característica de quien lo agredió, logro individualizarlo en la casa y uno de los funcionarios nos dijo: ‘vamos a detenerlo’. Una mujer nos quería impedir el ingreso a la casa. Entramos y el masculino corrió adentro. Borges no lo podía esposar, le dijimos que se parara y logramos levantarlos. Las personas de la casa no colaboraban. Borges lo llevaba de un lado, yo del otro y creo que Ocampo venía atrás. Povoroznik colaboró para llevarlo, yo tenía un gran dolor en la pierna. Llegamos a Jefatura y luego de entregarlo, Antoniow le dijo al Jefe de Operaciones que vayamos a hacer las diligencias correspondientes. En el móvil de Borges fuimos a la Segunda para hacerlo”, concluyó.
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