El centro de estudios Junta Abya yala por los Pueblos Libres divulgó un documento de repudio a la distinción que el gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, brindó al empresario banquero Enrique Eskenazi. “No hay compatibilidad posible entre los intereses del capital financiero y la necesaria descolonización de la educación en la provincia y el país”, sostiene la agrupación entrerriana.
Con el título “Bordet, la plata y la soja”, la entidad integrada por historiadores, periodistas, artistas y docentes de la provincia, afirma que el empresario homenajeado encabeza con sus familiares la lista de los que más fondos sacaron del país en estos años, y además tiene que dar cuentas en la justicia por sus vínculos con fondos buitres. El mandatario —añade la Junta Abya yala— “debiera abocarse a cumplir de una vez por todas con la Constitución de su provincia, que está infringiendo en varios artículos referidos a las finanzas, durante todo su mandato. La cultura, los saberes, la educación se cultivan exactamente en las antípodas del capital usurario”.
El foro de estudiosos entrerrianos también cuestionó la entrega del doctorado Honoris Causa al empresario Gustavo Grobocopatel, rey de la soja, en la Universidad de Concepción del Uruguay. Este es el texto completo de la nueva declaración de la JAPL, divulgada este 21 de julio.
BORDET, LA PLATA Y LA SOJA
La Junta Abya yala por los Pueblos Libres repudia el homenaje que el gobierno de Entre Ríos rindió al banquero Enrique Eskenazi, y con él, al perverso sistema financiero que domina el mundo y reduce a nuestra provincia a un estado de servidumbre.
Miles de mujeres y hombres de esta provincia se esfuerzan por mostrar los daños del dominio del sistema financiero sobre la economía, y de la economía sobre la sociedad, y el gobernador Gustavo Bordet, como una burla, premia a su socio banquero que, además, acaba de ser denunciado por ser el principal empresario argentino en realizar envíos de dinero al exterior en los últimos años, junto con sus familiares.
No hay compatibilidad posible entre los intereses del capital financiero y la necesaria descolonización de la educación en la provincia y el país. Y menos cuando se trata de empresarios tan cuestionados, expresiones cabales de la patria contratista, parasitaria.
En un listado de cien personas que “formaron activos externos” durante el gobierno de Mauricio Macri, una conocida fuente periodística nacional aseguró que esa nómina está encabezada por Enrique Eskenazi (homenajeado por Bordet), con 40,5 millones de dólares y el que le sigue es su hijo, Matías Eskenazi Storey, con 29 millones. Si se suman todos los miembros de la familia (el hijo Sebastián Eskenazi Storey, con 18,2 millones de dólares; la hija, Valeria Eskenazi Storey, con 7,8 millones de dólares y Esteban Eskenazi, con 7,4 millones de dólares), los Eskenazi sustrajeron a la inversión productiva en el país más de 100 millones de dólares”, denunció el periodismo y no hubo respuesta de los empresarios.
Al mismo tiempo, sabemos hoy que Enrique, Sebastián, Matías y Ezequiel Eskenazi deben dar testimonio en los Estados Unidos por sus vínculos con el fondo buitre Burford que pleitea contra el Estado argentino, luego de la increíble negociación por la cual estos empresarios intentaron quedarse con parte de YPF sin invertir.
No extraña que los lobos se vistan con piel de cordero en las llamadas fundaciones, que por cada millón que ganan en negocios con el Estado reparten cero coma cinco; pero molesta que sus socios y aduladores pretendan, al mismo tiempo, ser “representantes” del pueblo.
El gobernador de Entre Ríos no sólo le extiende la monopolización del manejo del dinero de los entrerrianos a un banquero, en la mejor expresión de la oligarquía, y contra lo que manda la Carta Magna provincial; sino que además lo aplaude y lo abraza como si fuera un modelo. Esta Junta Abya yala por los Pueblos Libres sostiene que Gustavo Bordet debiera abocarse a cumplir de una vez por todas con la Constitución de su provincia, que está infringiendo en varios artículos referidos a las finanzas, durante todo su mandato. La cultura, los saberes, la educación se cultivan exactamente en las antípodas del capital usurario.
LA UCU Y GROBOCOPATEL
Al mismo tiempo, esta Junta Abya yala reprueba la entrega del Honoris Causa al llamado rey de la soja, Gustavo Grobocopatel, en la Universidad de Concepción del Uruguay -UCU-, cuando son miles las mujeres y los hombres de esta provincia que denuncian los daños provocados por este sistema de transgénicos, herbicidas, insecticidas y pooles, que contamina el ambiente, pone en riesgo la salud de los embriones, enferma a nuestra gurisada, empobrece la biodiversidad, privatiza las semillas, desarraiga a las familias y concentra la economía en pocas manos. El premio de esa universidad privada va en sintonía con la tozudez de los gobiernos nacional y provincial para sostener, en una clara política recaudadora y ecocida, un modelo extraño a los intereses de las mujeres, los hombres y toda la biodiversidad de esta provincia. La Constitución de Entre Ríos tiene artículos claros en materia ambiental que tampoco se cumplen en la actualidad.
Junta Abya yala por los Pueblos Libres.
Entre Ríos.
21 de julio de 2021.
Más información: juntaabyayala.blogspot.com
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