El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
Marcelo Tenaglia, ex director de parques y paseos de la ciudad de Rosario analizó la situación del arbolado urbano en diferentes ciudades de Latinoamérica. Destacó el trabajo que se esta haciendo en nuestra ciudad al plantar especies nativas.
En una entrevista brindada al medio Carbono News, Tenaglia, se refiere a la importancia que tiene en las grandes metrópolis el arbolado urbano, no solo como ornamental, sino también para reducir las altas temperaturas y mitigar el calentamiento global.
Se prevé que en 2050, el 80% de las personas estarán viviendo en metrópolis. En Latinoamérica, según el Banco Mundial, este proceso será aún más intenso: nueve de cada diez vecinos del subcontinente vivirá en zonas urbanas para mediados del siglo XXI.
Si bien las ciudades cubren solo un 3% de la superficie terrestre del planeta, son responsables de tres cuartas partes de las emisiones globales de carbono, y consumen dos terceras partes de la energía generada a nivel global.
"La vegetación autóctona recupera mariposas, picaflores, aves y fauna en general. Debemos pensar en remediación y no en especies que crezcan rápido. Las necesidades políticas no deberían estar por sobre las ambientales"
Es por eso que las especies urbanas juegan un papel cada vez más importante en la mitigación del calentamiento global. Las calles que disfrutan de varias especies por cuadra registran temperaturas entre dos y cinco grados más bajas que las que carecen de un follaje protector.
Para Tenaglia, lo más importante es combatir las "islas de calor" y crear extensos mantos de sombra. "Debemos tener coraje y romper veredas. Tenemos que plantar todo lo posible. Hay que cambiar polvo por hojas, flores y frutos, aunque esto último nos signifique mucho más trabajo", aseguró.
Y amplió: "Las mejores especies para colocar son las nativas, las que corresponden al bioma del propio territorio. Algunas plantas exóticas terminan perjudicando nuestro medio ambiente aunque lo embellezcan. Suelen producir semillas en exceso que invaden los pocos sitios que tenemos en equilibrio. La vegetación autóctona recupera mariposas, picaflores, aves y fauna en general. Debemos pensar en remediación y no en especies que crezcan rápido. Las necesidades políticas no deberían estar por sobre las ambientales".
"Lo ideal es colocar varios árboles en cada vereda. Todas las aceras deberían estar ocupadas por especies de alineación. El mínimo no debería ser inferior a 12 metros cuadrados de plantas por cada vecino. Rosario tiene un árbol cada cinco habitantes, Córdoba y Mendoza uno cada veinte y Buenos Aires uno cada ocho habitantes", analizó Marcelo Tenaglia
Actualmente, Concepción del Uruguay, en la provincia de Entre Ríos, está forestando solamente con nativas. "Recurrieron a arrayanes, guayacanes, ceibos, chañares, lapachos, laureles, algarrobos y durazneros, entre otros. Se trata de ejemplares de todos los tamaños que se pueden adaptar a cada una de las veredas a ocupar. Con trabajos de este tipo tendríamos ciudades mucho mejores" sostuvo Tenaglia.
Fuente: Carbono News
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