El dirigente de Federación Agraria Argentina (FAA) delegación Entre Ríos, Alfredo Bel, analizó el panorama del sector ante la falta de gasoil que afecta al país y aseveró que "es una situación de mucha precariedad y de mucha improvisación".
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Bel reiteró que “el gasoil está en falta, en escasez, y no se ha normalizado la situación” y explicó que “normalmente lo que pasaba es que por los cupos a fin de mes, en la última semana de mes, se producía una escasez”.
Explicó que “el agro no se provee por estación de servicio sino que recurre al sistema de distribución mayorista que también tienen cupos y cuando llegaba la última semana del mes, normalmente no había más combustible. Pasó el mes de mayo con esa faltante y hace ya 20 días que seguimos con eso, lo cual trae un montón de complejidades al sector que está terminando la cosecha gruesa y empezando la siembra de fina, pero Entre Ríos tiene un montón de otras actividades como la citricultura que está en plena cosecha y que requiere enviar rápido a destino porque es un producto perecedero; la avicultura que todos los días tiene cientos de camiones que generan muchísimo movimiento, la lechería y la ganadería son similares”.
“Sin embargo hoy no está garantizado el abastecimiento en todos los niveles desde el básico que puede tener cualquier persona para moverse en su actividad comercial o productiva, o un productor que requiere más cantidad para garantizar la cosecha o la siembra”, advirtió.
En relación con las declaraciones del ministro de Producción de Entre Ríos, Juan José Bahillo, quien estimó que “en 45 días” estaría solucionado el problema, el dirigente agrario afirmó: “Nadie sabe nada y todo lo que hacen son estimaciones, porque hace unos 15 días (el jefe de Gabinete, Juan) Manzur también dijo que en 48 horas lo resolvía”.
Consideró que “acá hay cuestiones que el gobierno nacional y sus estructuras, como YPF que es el principal jugador en esto, deben resolver; en nuestro sector más del 70% del abastecimiento lo maneja YPF con lo cual tendría haber adoptado ciertas medidas oportunamente para garantizar el abastecimiento” y como ejemplo mencionó que “YPF también tiene ganancias inesperadas ya que tiene una matriz de negocios como el abastecimiento de los fertilizantes donde la urea pasó de 350 o 400 dólares a 1.400 dólares en el primer semestre”.
Al respecto, describió que “con esos dólares que le estaban ingresando de más, podría haber previsto importar más combustible, lo que es necesario porque a la Argentina no le alcanza el gasoil que produce. El año pasado cuando se aprobó la ley de biocombustibles bajaron a la mitad el corte de biodiesel, Argentina tiene infraestructura para producir en cantidad pero del 10% se bajó a 5% para beneficiar a todos los actores que trabajan el mecanismo de combustibles fósiles. Ahora se está pensando en volver al 10 o el 15% de corte, y seguramente las estructuras de biodiesel rápidamente lo podrán abastecer pero rápidamente necesitan una disposición de la Secretaría de Energía y ponerse de acuerdo en el valor; importar algo más y luego ver si es necesario racionalizar”.
Como resumen, aseveró que “acá lo que ha faltado es previsibilidad, porque en la pandemia se bajaron muchas actividades aunque el campo se mantuvo porque fue declarado esencial y en esto el uso de combustible no cambió mucho, y la cosecha se puede demorar 15 días más o menos en función del clima, pero ahora lo que está pasando es que no se está llegando con la mercadería a los puertos”. “El productor prioriza la cosecha y quizás no pueden salir los camiones necesarios para cumplir os cupos para llegar a los productos; hay productores que tienen tres actividades y deja alguna que no es tan urgente para más adelante; cosas de ese tipo están pasando todos los días y cada productor o empresario prioriza cuestiones relacionadas a la cosecha o la siembra”, definió.
“El gobierno tendría que haber revisto esto, en marzo o abril previo a Semana Santa y ahí ya se veían los mecanismos de cuánto iba a faltar pero acá el problema es que no hay dólares, no se puede importar, el gobierno tomó la decisión política de disminuir el corte de gasoil y el diésel, con el biodiesel; y eso significa tener un 5% más de abastecimiento de combustible fósil que no está”, señaló.
En cuanto a los lugares de la provincia donde no hay nada de combustible, Bel sostuvo que “es muy dinámico porque los productores tienen mucho contacto con sus abastecedores y donde está faltando, las empresas les avisan y se espera a que lleguen los camiones, con lo cual pueden pasar 24, 48 o 72 horas sin combustible pero están a la expectativa de que llegue el camión”.
Por último, indicó que las petroleras de bandera blanca “van al mercado, las estructuras cooperativas tienen que ir y comprar; y hoy se hace mucho canje pagando con soja, incluso a YPF”. “Es una situación de mucha precariedad y de mucha improvisación, esto se podría haber previsto claramente y tomar medidas que pudieran haber menguado esta situación de tanta escasez y todas sus consecuencias”, concluyó.
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