Hay instituciones escolares que están en condiciones de adaptarse pero hay otras que están lejos de cumplir esas exigencias.
En estas jornadas hay un fuerte debate en diferentes sectores de la sociedad sobre el retorno a las clases presenciales, desde los sectores gremiales docentes entrerrianos hay una fuerte oposición, mientras desde que el Gobierno se maneja la posibilidad de hacerlo desde febrero.
El Portal de las Cooperativas consultó al rector de la Cooperativa de Trabajo Crear Limitada, un colegio secundario que funciona en la ciudad de Concordia, Rolando Kleiman, para saber su opinión al respecto.
“Creo que es necesario el retorno a las clases presenciales, más allá de que en el caso nuestro trabajamos bien todo el 2020 porque nuestros alumnos ya estaban preparados para el trabajo online, evidentemente se notó en ellos la necesidad de estar en la escuela, de la presencia del profesor con ellos en el aula y poder compartir, mirarse, es la forma adecuada de transmitir los conocimientos, ese ida y vuelta con los alumnos es muy necesario”, dijo de entrada como para dejar en claro su postura.
“Hay que establecer protocolos que cuiden la salud de los chicos y los docentes”, aseguró.
Y luego fundamentó: “Hay una realidad, los chicos se siguen juntando, no es que cada uno está en su casa, haciendo aislamiento, de que no tiene contacto, esto es así, no respetan distanciamiento social, nada de eso, uno los ve los fines de semana en la costanera, en la playa, de noche en los boliches, todos juntos. Lo que si tiene que hacer la escuela es ponerse en condiciones para evitar la propagación del virus, hay que buscarle la vuelta. Se que muchas escuelas no están preparadas para el protocolo correcto, por la falta de infraestructura e insumos sobre todo, como haremos para tener la lavandina, el alcohol, todos los productos necesarios para hacer la limpieza necesaria”.
La vacunación a docentes
Se le planteó a Kleiman si no consideran importantes que los docentes sean considerados prioridad a la hora de la vacuna, su respuesta no deja lugar a dudas, “son mi señora que también es docente decidimos, ‘si no hay vacunas nos contagiamos seguro’, porque es muy difícil evitar por más que tomemos las precauciones necesarias, es difícil decirle a un alumno que se te acerca para una pregunta ‘no, no, quédate a 2 metros’, más allá que debes hacerlo, es difícil que los chicos lo respeten, y no es por mala voluntad, porque son chicos que conocemos desde hace mucho, desde que entran a la escuela, son seis años que pasan adentro, hay una relación muy cercana, es muy difícil no saludarse, o que no puedan expresar su cercanía y de que te extrañó, con un beso o un abrazo. Creo que si los docentes no son vacunados se van a contagiar, y hay mucha gente en situación de riesgo, muchos con patologías previas”.
El docente además dejó margen para una situación de respuestas adversas, “si esto no funciona hay que volver para atrás, pero no ‘el por las dudas no empezar’, hay que hacerlo, ver, probar, y si no funciona hay que para de vuelta y ver como se solucionan los problemas que se vayan presentando, si uno ve la experiencia en otros países se da cuenta de que es así, lógico que tienen otras estructuras y otras realidades, tendríamos que pensar en eso, no en si empezamos o no, sino cómo empezarlas, ese sería el planteo”.
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