El año pasado, al aprobar el presupuesto, Bordet y sus funcionarios se aumentaron sus sueldos casi un 36 por ciento; pero a los docentes les ofrecen la mitad y en cuotas.
Por AMÉRICO SCHVARTZMAN de EL MIÉRCOLES DIGITAL
En Entre Ríos, los sueldos de los funcionarios se aprueban junto con el presupuesto provincial, la llamada “Ley de Leyes”, que se discute a fines de cada año. El 14 de diciembre de 2016 se aprobó (por unanimidad, es bueno aclararlo) el que corresponde al año actual. Y en ese presupuesto, los funcionarios provinciales encabezados por el gobernador Bordet se autoadjudicaron remuneraciones un 35,7 por ciento superiores a las del año anterior.
La noticia, que algunos medios parecen haber descubierto ahora, causa impacto: son los mismos que les ofrecen a los docentes la mitad de ese monto (18 por ciento) y encima en cuotas. Si se considera lo que cobraban en 2016, ellos cobran el doble de ese aumento desde que empezó el año. Pero a los docentes les ofrecían 6 por ciento en marzo.
El tema es que algunos medios, al presentar esta noticia vieja como si ese aumento fuera ahora --es decir, al trabajar torpemente la información-- esos medios le dieron al gobierno la posibilidad de salir a desmentirlo. Así, la noticia terminó siendo que el Gobierno salió al cruce de una nota periodística a la que calificó de "maliciosa" y encima se dio el gusto de decir que "es totalmente falso que los funcionarios y el Gobernador vayan a cobrar aumentos diferenciados".
Como suele suceder, ambas cosas son verdad: no tienen aumentos diferenciados. Pero lo que los pícaros funcionarios no dicen es que desde enero de 2017 ya cobran casi un 36 por ciento más que en el año anterior.
SE SABE DESDE NOVIEMBRE
El sitio digital Entre Ríos Ahora publicó en noviembre de 2016, poco antes de que el Senado convirtiera en ley el presupuesto, las cifras que ahora algunos medios presentaron como si se conocieran recién hoy. Allí, en una completa nota de Gonzalo Núñez, daban cuenta de lo que recibirá este año cada funcionario, e inclusive presentaba una serie de gráficos con todo detalle, además de las planillas complementarias que constaban en el proyecto de presupuesto y a las que todo el mundo podía acceder a través del sitio de la Cámara de Diputados. Es decir: no era ningún secreto (ver link a la noticia original aquí).
DE DÓNDE SALE EL 35,7 POR CIENTO
Para no aburrir con la lista de todos los sueldos, tomaremos como base solo el del Gobernador. En 2016, Gustavo Bordet se había aumentado el sueldo (y el de sus funcionarios) por decreto a fines de marzo, junto con toda la administración provincial. Se publicó en el Boletín Oficial del 7 de abril, y por imperio de ese incremento (que era retroactivo a febrero), el Gobernador había dispuesto “mejoras en los haberes de los distintos escalafones de la Administración Pública Provincial”, con lo cual era razonable “extender tales incrementos también a las Autoridades Superiores y Personal Fuera de Escalafón del Poder Ejecutivo Provincial”, según el texto del decreto. Con ese aumento, Bordet pasó a cobrar, en total, 49.353,64 pesos. Ese fue su salario durante el resto de 2016.
Las remuneraciones de las autoridades superiores y personal fuera de escalafón del Poder Ejecutivo Provincial, se componen de tres ítems: la asignación base, los gastos de representación y un adicional remunerativo no bonificable. La suma de los tres da como resultado el salario total.
A fines de año, cuando se votó el presupuesto, esa suma total del Gobernador pasó a ser de 66.972,89 pesos para 2017. Y esa suma es, exactamente, un 35,7 por ciento más que el salario que cobró durante 2016.
No hay que aclarar nada más. Bordet (y todos sus funcionarios) cobran, desde enero de este año, casi un 36 por ciento más que el año anterior. Pero a los docentes les ofrecen la mitad de ese aumento, y en cuotas.
POR SOBRE LA INFLACIÓN
Desde hace varios años, algunos sectores vienen planteando la necesidad de que los sueldos de los funcionarios se aten al salario mínimo vital. Hechos tan escandalosos como éste muestran la necesidad de insistir en ese planteo.
Pero también, exhiben lo imperioso que resulta que los gremios y los ciudadanos comiencen a exigir participar en la elaboración del presupuesto provincial, porque (para decirlo mal y pronto) es en ese momento en el que los funcionarios los “vacunan” mientras, al mismo tiempo, protegen sus propios bolsillos.
¿Una inmoralidad total? Por supuesto ¡qué duda cabe! ¿Cómo calificaría usted a los directivos de una empresa que celosamente cuidan su poder adquisitivo pero no el de sus colaboradores, y encima hacen todos lo posible para ocultárselo?
CONCLUSIONES DESOLADORAS
La conclusión es transparente y desoladora: las dirigencias políticas cuidan muy bien su poder adquisitivo. Pero además, se desentienden del de sus conciudadanos y conciudadanas que viven de ingresos fijos, y por si fuera poco, ensanchan la brecha (porque se aumentan por sobre la inflación). No deberían quejarse cuando la gente usa la palabra “político” como un insulto. Son ellos los que la han transformado en eso.
Pero además, el Presupuesto fue aprobado por unanimidad. Hay que insistir en este punto. Porque en esto, como en otros temas, no hay diferencia entre "Cambiemos" o el FPV, entre macristas o kirchneristas, entre peronistas o radicales. A lo sumo algunos esbozan lamentables autodefensas cuando la difusión de sus ingresos produce indignación social, del estilo: "Bueno, a los que les parezca excesivo, que lo donen" o falacias de ese tipo. No obstante, también hay que reconocer que a la mayor parte de la ciudadanía este tema no parece interesarle. Solo cuando su bolsillo está en problemas. Si no fuera así, votaría a los pocos partidos que proponen regular este tema. Y eso no sucede.
EN SÍNTESIS
- El año pasado, al aprobar el presupuesto, los funcionarios previeron un aumento del 35,7% para sí mismos. No fue ahora. Fue hace cuatro meses.
- La previsión inflacionaria que el mismo presupuesto establecía para este año era del 17%. En criollo: desvergonzadamente, los funcionarios se aumentaron sus remuneraciones el doble de la inflación que ellos mismos anunciaban.
- A esto lo aprobaron por unanimidad en el Senado que, recordemos, tiene mitad de justicialistas y mitad de Cambiemos.
- El reclamo docente se ve aun más fundamentado: el Gobierno que primero les ofreció un 6% y ahora les ofrece el 18% pero en cuotas, se aumentó a sí mismo, desde diciembre de 2016, el doble de esa cifra.
- En octubre y noviembre, que es cuando se empieza a discutir el presupuesto, convendría que los gremios y la ciudadanía toda estén más alertas: ése es el momento en que los “vacunan”.
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