El escolta Justo Catalín será en la próxima Liga Argentina de Básquetbol el jugador del actual plantel de Tomás de Rocamora que más presencias tendrá ya que debutó en la temporada 2017-18. Dentro de no muchos partidos arribará a los 200 con la camiseta del Rojo y es el tercer goleador histórico del equipo detrás de Galo Impini y Matías Cuello. El jugador nacido en La Paz habló de sus expectativas a muy pocos días de un nuevo comienzo.
“Como principal es poder disfrutar la temporada, seguir desarrollándome y afianzándome en lo que es la Liga Argentina. Esperemos poder imponer al máximo la idea de juego con el equipo que propone el técnico (Agustín) Pujol, en la cual me siento muy cómodo; donde, además, me da mucha confianza y tranquilidad para tomar decisiones y responsabilidades”, arrancó diciendo el perimetral de 24 años y 1.80 metros de altura.
Tras haber culminado la temporada anterior, Catalín se mudó a Independiente de Tandil para jugar la Liga Federal y luego de esa experiencia recaló en Independiente de La Paz para incursionar en la Conferencia 2 del Pre Federal de la FEBER. Sobre esto, resumió: “Lo que fue mi paso por las Ligas Federal y Pre Federal fueron más que positivas, donde tuve que tomar un rol nuevo de más responsabilidades y determinación en lo que era el juego. También, me sentí muy contento de volver a vestir los colores de Independiente de La Paz, club donde nací”.
Dentro de lo que es la actual pretemporada, Rocamora disputó cuatro amistosos en los que cosechó dos triunfos y sufrió dos caídas frente a equipos de la categoría como La Unión de Colón y Echagüe de Paraná. “Creo que los amistosos fueron muy positivos, donde el rendimiento fue de menor a mayor. Pudimos ver las falencias en donde trabajar como también las virtudes y aciertos en la idea de juego que proponemos. Mantenemos una base del equipo de la temporada pasada y eso facilita mucho el entendimiento en el equipo”, afirmó al respecto.
Luego, agregó: “El primer partido contra La Unión creo que fue en el que más incómodo nos sentimos ya que teníamos apenas dos semanas y media de pretemporada y el objetivo inicial era ponernos en óptimas condiciones físicas. Ya en el segundo amistoso veníamos mucho más rodados y se vio reflejado en el partido. Y los partidos contra Echagüe eran una linda medida, nos enfrentábamos a un equipo de otra zona del cual sabíamos muy poco”.
“Pienso que el primer partido contra Echagüe fue de lo mejor de los amistosos aunque tuvimos una rotación muy corta con dos bajas importantes en el equipo como la del Oso (Brian) Díaz y Valentino Occhi; lo cual, creo, que se vio reflejado en el último partido por el cansancio acumulado”, concluyó.
Informe: Mauricio Galarza (Prensa Rocamora).
Foto: Carlos Rambo Lozano.
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