La bajante del río formó un arenal de más de un kilómetro frente a Paraná

El río Paraná mide 34 centímetros este jueves a la altura del puerto de la capital entrerriana; el curso de agua registra diez centímetros menos en relación a la última medición de la semana pasado, de acuerdo a los registros de Prefectura.

Debido a la bajante del río Paraná, frente a la capital entrerriana asoman los bancos de arena que se encuentran entre las islas Curupí y Puente, ubicadas frente a la sede de Prefectura. Elonce registró en imágenes los cambios que se observan a causa de la retirada de las aguas.

“La punta del islote Curupí se unió, prácticamente, entero y la gente puede pasar caminando de lado a lado, como ocurrió hace unos años atrás; es un arenal de más de un kilómetro y la vista es impresionante”, explicó Adrián Pantera Monti, uno de los responsables de una de las empresas que brindan los recorridos náuticos por el Paraná.

Y agregó: “En la punta del islote Curupí, donde se forma la isla hace 90 años, empieza a unirse en 300 metros de arena hasta el cruce completo, de casi un kilómetro, hasta la isla Puente”.

El prestador turístico recordó a Elonce que “en 2021-2022, el Paraná registró 50 centímetros por debajo del 0 de escala de medición. Y ahora, si bien no llegó a esos registros, la bajante sí es pronunciada”. “Los ríos están muy secos, no ha llovido y eso se debe al cambio climático”, apuntó.

Caminar y meditar por el arenal

“Los paranaenses y turistas disfrutan del arenal porque, por la bajante, la ciudad no tiene sus playas habilitadas: cuando esta tan bajo el río, si uno quiere meterse al agua, cae abruptamente a la parte más onda”, indico Monti.

Fue por eso que, según contó, hay quienes cruzan a caminar y meditar por el arenal. “Es una experiencia única porque, al atardecer, es soñado”, sentenció.

Cuidado con las rayas

“Cuando uno ingresa al río, hay que tener cuidado con las rayas porque son bichos que se tapan con arena y el problema están en pisarlos; cuando uno camina, debe arrastrar los pies”, recomendó Monti.

Complicaciones en la navegación

Debido a la bajante del Paraná, el prestador turístico mencionó que “quienes trajeron sus barcos desde Buenos a Paraná tuvieron problemas por la bajante. Pero los que navegan en kayaks y piraguas no tienen inconvenientes porque se trasladan con poca agua; y las embarcaciones que necesitan 40 centímetros, si levantamos el motor, pasamos por lugares muy bajos”.

“Los que tienen más problemas son los veleros y los yates, de hecho, en Club Náutico hubo que dragar para que pudieran salir porque el río estaba muy bajo y esas embarcaciones necesitan como mínimo dos metros”, acotó al respecto.

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