Los Demócratas y el Pusilánime

Si es cierto que estamos en un país que "ha crecido", se entiende que es en todos los aspectos salvo que, quien lo dice, tenga una semántica muy particular sobre lo que es crecimiento.

(*) Por JUAN CARLOS LUCIO GODOY

Es no creíble que haya crecido si el candidato, de quien dice que crecimos, no se anima a debatir. ¿O tiene miedo? Es este caso es un pusilánime y los miedosos no pueden ser presidentes y son gobernadores solo porque lo soportan desde la presidencia como es el caso del “Motonauta” candidato. Me dio vergüenza propia ser habitante de un país en donde un candidato no se anima a debatir o, lo que sería peor, no lo dejen debatir.

En cualquier país normal el debate es la sustancia de la política y por ello esta actitud es más propia del subdesarrollo profundo y entonces no se puede decir desvergonzadamente que este país ha crecido. Este país está en decadencia cuando la debilidad de sus gobernantes y candidatos es tan Enorme.

Ahora, si comparamos en nuestro análisis distintas situaciones en el país, nos damos cuenta que tiene lógica esta situación. Si mentimos en el Indec, donde se miden las estadísticas de la situación socioeconómica del país; si se reconocen coimas en el gobierno; si tenemos el primer vicepresidente de la historia de nuestro país procesado y a punto de ir preso, tiene lógica que el candidato del establishment no se anime a discutir. ¿Quién le puede creer a un representante de la mentira y los procesados?

Lo cierto es que en la noche del domingo algo ganamos, o mucho, debatieron los que son demócratas y no lo hicieron, como Menem, los que no se animan, los que no son tan demócratas y en definitiva los pusilánimes, lo peor como calificativo porque los débiles fueron siempre castigados por la sociedad pues ella, nuestra gente, lo que pretende son líderes valientes para enfrentar el futuro.

(*) Candidato a Vice Gobernador por la alianza “Cambiemos”.

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