Las estaciones de servicio que venden gasoil en el casco urbano de Concepción del Uruguay informaron a El Miércoles Digital que "hasta ahora no tenemos problemas y vendemos normal". Sin embargo, en los playones que venden a los camiones de transporte reconocen que se dificulta conseguirlo, aunque siguen vendiendo. En otras partes de la provincia directamente no se consigue. El problema de fondo es el precio, estiman que si actualizan los valores el combustible volverá a aparecer en los surtidores.
Un transportista que viaja por diferentes partes de la provincia consultado por este medio explicó: "En una Shell de Tala me costó 130 pesos, en la misma marca de estación pero de Nogoyá está a 117 pesos, pero en la YPF de la ruta, que anda entre 103 ó 104 pesos, te dan de a 50 ó 100 litros por camión o directamente no hay". Según su razonamiento la situación es la siguiente: "Esos precios son una mentira, cuando les autoricen el aumento volverá a haber, como siempre pasó", señaló con puro pragmatismo.
Desde una de las estaciones de servicio ubicadas a la salida de La Histórica señalaron que: "Ya desde hace meses se complica conseguirlo, lo van entregando de a poco, con cupos".
Una situación complicada
La situación fue advertida por la Cámara de Estaciones de Servicios (Cesgar), desde donde se mencionó que que el litro de nafta súper debería valer cerca de los 170 pesos.
Pese al último incremento de los combustibles, los estacioneros advierten acerca de un serio faltante de gasoil y del desfasaje tarifario de toda la línea de combustibles. En eso, apuntaron que el precio del litro de gasoil debería rondar los 150 pesos, al tiempo que el de nafta súper tendría que costar entre los 170 y 180 pesos.
Según la entidad el faltante del gasoil comenzó hace cuatro meses pero empezó a notarse en estos últimos días a raíz del aumento que empezaron a aplicar los mayoristas para con el transporte y las empresas del rubro energético.
En tal sentido, evaluó que el precio del gasoil aún se expende a 112 y 115 pesos, pero ese importe cuenta con un desfasaje de entre un 32% y un 35%, lo cual elevaría el precio entre 140 y 150 pesos.
“Lo que sucede es que los mayoristas lo venden a precio actualizado a los grandes consumidores como pueden ser los transportistas o generadores de energía. Es por eso que los transportistas recurren a las estaciones de servicio con cupos para poder cargar a menor costo”, explicó como la razón principal por la cual los surtidores están a poco de quedarse sin combustible al precio actual.
Sin embargo, ese no es el único problema. Sucede que las naftas en general también presentan un retraso tarifario en comparación con los precios internacionales.
“La nafta, el diesel y el gasoil tienen los impuestos congelados desde el año pasado que, de ajustarse, elevaría un 25% el costo al público solamente de impuestos. Y sumado a la importación, en el caso de la nafta súper tendría que estar alrededor de los 170 y 180 pesos”, precisó.
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