Quino not dead

Hoy miércoles 30 de septiembre de 2020 sobre Quino se escribieron miles de caracteres y se escucharon docenas de voces para hablar de su persona y de su vastísima y siempre vigente obra. Es así que, dejando de lado aquellos datos biográficos que se encuentran en todos lados, decidimos recolectar y compartir las palabras de humoristas gráficos que dibujan en este sitio y los conceptos de queridos colegas de medios amigos.

Una lagrimita por Quino, el más grande (Por Aco)

Su laburo nos hizo sonreír, reflexionar y ver las cosas de otro modo con cada chiste, con cada dibujo (tantas veces más cercano a una tesis crítica sobre la realidad, sobre el mundo, sobre lo humano, que a una broma destinada a hacer reír). Deja una obra impresionante, que se puede abordar desde la filosofía y desde la semiótica y desde la historia y desde la epistemología pero que, sobre todo, hizo más dulce la vida de mucha gente, y a veces mucho más amarga como reflexión necesaria para que algún dia seamos capaces de vivir una vida mejor. El gran Quino hacía filosofía a través de sus dibujos. Con humor, este creador --el más grande de los humoristas gráficos de la Argentina-- nos ayudó durante décadas a pensar el mundo y a la humanidad, a revisar lo naturalizado y a ver críticamente nuestros propios actos. Quino, Joaquín Lavado, el papá de Mafalda, era, y es, el más grande de todos. Hace once años, cuando la UNER lo nombró doctor Honoris Causa, le hice un dibujito y tuve el alto placer de que se lo obsequiaran. No pude estar, tampoco pude entrevistarlo (viejo sueño que ya no podrá ser), pero estuve a través de mis queridos compañeros Maxi Sanguinetti, Marbot y Jaimo. Y siento que Quino y su obra están en mí, que forman parte de lo mejor de nuestra identidad. Hay un dibujo de Quino para ilustrar cada cuestión que me aflige, cada motivo que convoca a la lucha, cada sonrisa que entreteje el pensamiento. Y eso no muere. Hasta siempre, maestro, y gracias por tanto.

Pildoritas de Quino (Por Maxi)

Quino era el Lennon de esa trilogía santa del humor gráfico junto a Caloi y Fontanarrosa. Sólo que fue el último en irse. Uf, Quino. Por él me dediqué a dibujar. Nada original, la mayoría de los humoristas gráficos de la segunda mitad del SXX empezaron a hacerlo luego del impacto que les produjo Mafalda. En la escuela, mis compañeros me desafiaban: abrían al azar cualquier librito de Mafalda, me leían el comienzo de una tira y yo se la completaba de memoria cual si estuviera recitando el himno (…) Cuando vino a Paraná, hace 11 años, a recibir el Honoris Causa que le dieron en Trabajo Social nos invitaron a varios humoristas a hacerle unos dibujos que se encuadernaron y que se le entregaron en forma de libro. En el grupo de WhatsApp de ACIDEZ Eva Cabrera envió varias fotos de esa tarde. En una de ellas, que no había visto, se registra el momento en que me chanta un beso en el cachete. Como el papá de Mafalda cuando ella le hace lo mismo en una tira memorable, pienso ahora, no tendría que haberme afeitado ese costado por unos cuantos días… (El texto completo, acá).

“Quino deja una obra fascinante en el arte, tanto escrito como gráfico” (Por Jaimo)

Entrevistado por LT14 y triste por la noticia, el humorista paranaense Jaimo reflexionó sobre el humor de Quino: “Siempre fue directo y profundo al sistema social político mundial analizándolo, descarnándolo. Quino lo hace de una manera magistral, no sólo con Mafalda, que sigue reflexionando sobre temas que siguen siendo actuales como la guerra, la familia, las relaciones, los mandatos, la economía, la pobreza. La idea del humor siempre es generar otro lenguaje y reírnos de nosotros mismos –si somos lo suficientemente inteligentes- y a partir de ahí ver ese contexto, y los argentinos sabemos bastante de eso (…) En los 60 y los 70 había cosas de las que no se podía hablar, había que ser sutil, pero los temas eran candentes. Al igual que ahora había otras grietas que Mafalda mostraba desde su lugar en la clase media (…) También fue un gran dibujante y no se habla mucho de eso. También había que transmitir todo eso desde la gráfica (…) Quino deja una obra fascinante y contundente en el arte, tanto en el escrito como en el gráfico. Hay que releerlo permanentemente, más en estos momentos en que a veces olvidamos algunos conceptos que en mi opinión son esenciales” (Click acá para escuchar la entrevista completa).

Deja tu comentario

comentarios