El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
El domingo se consumó la entrada del Tomás de Rocamora a los playoffs del TNA, donde desde el viernes enfrentará a San Isidro de San Francisco en una serie al mejor de cinco juegos, y tanto Nicolás Lauría, goleador del encuentro ante Sport Club, y el entrenador Martín Amden, hablaron de lo que fue el último partido y también este logró tan valioso para la institución.
“La verdad que nos dimos un gustazo, es una alegría enorme… luchamos durante todo el año, con lesiones, no lesiones, sin americano, teniendo muchos vaivenes, con partidos ganando de visitante y perdiendo de local; pero creo que pudimos zafar todos los obstáculos y llevarnos este premio que es importante no sólo para el equipo sino para la ciudad también porque después de tres años de estar en el TNA entrar a los playoffs es algo muy meritorio”, comenzó diciendo Nicolás Lauría en relación a la clasificación.
El ex Peñarol de Mar del Plata dijo después: “Además, siempre estuvimos abajo en el torneo; veníamos noveno o décimo, arrancamos el 2014 así, hoy estamos octavos y metidos en un playoffs con la esperanza de pasar la primera vuelta que no es imposible”.
Respecto de la fue el encuentro con Sport y el hecho de tener que ganar para conservar chances, señaló: “Creo que estuvimos muy tranquilos, por momentos el partido se despelotó pero el primero y segundo cuarto fueron tranquilos. No nos volvimos locos, sabíamos que si hacíamos lo que debíamos el partido se iba a dar a nuestro favor, tuvimos la suerte también que ellos vinieron en el día, pero gracias a Dios el equipo estuvo mentalmente a la perfección y se pudo lograr el objetivo”.
Rocamora tenía que ganar pero su suerte estaba atada también a lo que ocurriera en otras tres canchas. O por lo menos en una de ellas. “Si ganábamos y los demás también lo hacían nos íbamos a ir tranquilos porque habíamos dejado todo, de todas maneras no se dio y reitero que fue un mérito doble porque arrancamos el año últimos y ahora estamos en playoffs con un equipo humilde, de bajo presupuesto y con todos los problemas que surgen en la temporada. Esto es algo muy bueno y hay que disfrutarlo”.
Más tarde, también dio su visión sobre lo logrado el entrenador Martín Amden. “Fue una temporada muy particular porque no hicimos pie en la primera parte. Además de eso tuvimos que cambiar la fisonomía y la estructura del equipo por completo, donde tuve que pensar noche y día en cómo hacer para establecer una sistema de juego con jugadores en los que estuvimos superpoblados en algunas posiciones y escasos en otras”.
“A algunos tuvimos que convencerlos para poder actuar en otras y ellos cedieron para obtener hoy una clasificación. En dos semanas nos llevamos dos objetivos: el primero, y muy deseable, fue mantener la categoría; y el otro que era más impensado cuando se reestructuró todo ya que había que barajar y dar de nuevo con 15 partidos por delante. Sin americano y con una estructura que tambaleaba porque no teníamos ficha U21 tampoco y la verdad que transcurrió todo así”, añadió.
El coach del Rojo dijo más adelante que “la segunda parte del año se tornó muy difícil, con un partido perdido e impensado acá ante San Lorenzo, los perdidos con Huracán y Ciclista sabíamos que eran perdibles y después la entereza que mostramos de visitantes para ganar tres juegos claves”.
“Entramos con la soga cuello, con un 9-9 que nos deja octavos mirando para arriba a un Sport que tiene un gran equipo y que termina tercero con un 9-9 también. Son cosas que llevan a decir a uno tarea cumplida por ahora pero queremos un poco más y ojalá nos den las piernas y la rotación para enfrentar a San Isidro de la mejor manera”, continuó.
Respecto a lo que será la llave ante San Isidro, comentó: “Ahora se pone a trabajar más mi cuerpo técnico. Juan (Varas) tiene una premisa que es la de ver los últimos partidos, Cali (Pérez) tiene otra que es mirar otros dos encuentros más y nosotros a prepararnos para el viernes; después, a cambiar o sostener lo que se haga el viernes para el domingo, y empezará un día a día muy interesante porque creo que nos nivelamos”.
“Hay que reconocer que ellos se armaron para estar donde están pero creo que Rocamora puede ser una rival difícil de enfrentar y un poco molesto. Ojalá lo podamos plasmar pero estoy muy agradecido a mis jugadores por haber mostrado lo que mostraron y por haberme dado la satisfacción de clasificar en el tercer año en el club; mantenerlo en la categoría y darle por primera vez una entrada a playoffs. Lo agradezco, lo hago público y espero que le lleguen a cada uno mis felicitaciones porque estoy tremendamente orgulloso de este equipo”, finalizó.
TEXTO Y FOTO: PRENSA ROCAMORA
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