El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
Con duros términos, en este texto Alejandro Bernasconi defiende al rector desplazado y acusa a la máxima autoridad de Uader, el rector Filipuzzi, de intervenir el Colegio para "esconder sus responsabilidades e incapacidades".
Por ALEJANDRO BERNASCONI (*)
Como trabajador de Uader quiero expresar mi solidaridad con el profesor Ramon Cieri y mi público repudio a la operación política de las autoridades de la FCyT y de la Universidad, mediante la cual se le inició sumario administrativo. La única realidad es que Uader tiene un problema sistémico para pagar los salarios de los trabajadores que ingresan a cubrir cargos y horas, y que, además, tiene problemas serios hace tiempo para que lleguen los títulos.
No es un problema del Colegio Nacional. Es un problema de la Universidad. La única realidad es que la justicia ha hecho responsable a las autoridades y las ha intimado a que resuelvan el problema. La medida adoptada sólo busca esconder esta situación mediante un chivo expiatorio explotado de manera mediática.
La realidad es que Uader paga a sus trabajadores ingresantes más tarde que cualquier empresario negrero del sector privado. He visto miles de presentaciones por errores de liquidación, o tardanzas en las mismas. No recuerdo ningún caso en donde se haya iniciado sumario administrativo a las autoridades de las escuelas y colegios, menos ya existiendo ya intervención de la justicia.
La medida de FCyT, sin dudas habilitadas por el rector Filipuzzi (son incapaces de hacer algo sin su permiso) sólo son un disfraz para esconder sus responsabilidades e incapacidades, independientemente de la existencia o no de problemas de "administración". Se sienten impunes para intervenir el Colegio Nacional. La misma impunidad con la cual compran silencio cubriendo cátedras sin concursos, impiden la conformación de Consejos de Carreras, y tienen todas las horas asignadas a clases frente a alumnos, sin recursos para investigación y extensión.
Para los compañeros es un aprendizaje. Ya eran el ajuste antes de Frigerio, y anticiparon lo por venir, y vendrán por más, se les habilitó crecer con demasiada complacencia. Y si fue por acuerdos políticos los padres del engendro deberán hacerse cargo.
(*) Docente.
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