Recibió un merecido reconocimiento social. El recuerdo de la noche en el Concejo Deliberante que -por un momento- unió puentes entre posturas irreconciliables. Su intención permanente por mejorar el periodismo local y su impulso a la APDU. El recuerdo imborrable de sus amigos y compañeros de trabajo. Su legado. Todas las fotos.
Texto y fotos: EL MIÉRCOLES DIGITAL
El martes 7 de junio, Día del Periodista, se inauguró oficialmente la calle “Carlos Ariel González Cardozo” en Concepción del Uruguay, en homenaje al recordado Uruguayo. Participaron sus familiares directos: sus hijos Ariel y Jorge González Duré; su esposa Teresa Duré; ex compañeros y compañeras de trabajo, colegas de la ciudad y la región, autoridades municipales, amistades y público en general.
Pese al frío un centenar de personas se dieron cita al barrio Rocamora para homenajear al ‘maestro de periodistas’, fallecido el 19 de octubre de 2014 a los 68 años en La Histórica.
El acto fue sencillo y austero, casi un fiel reflejo de su personalidad. Fue transmitido en vivo y en directo por los canales de redes sociales de la Asociación de Periodistas del Departamento Uruguay (APDU), generadas por el móvil de Canal 10 de San José (Ver aquí el acto).
Allí, se proyectó un video donde Fabián Galarraga, Betina Scotto, Américo Schvartzman, Gerardo Pipo Iglesias, Gustavo Sirota, Mario Morasán, Edgardo Andrés Visagno, Jorge Blanc y Mario Roveta, quienes compartieron con Carlos Ariel espacios en común en diferentes proyectos periodísticos (en las revistas ECO y Juntos, en el diario regional Hoy, en la radio LT 11, en el canal de Video Imagen y en medios de Paysandú), intentaron retratarlo con palabras.
Con su impronta, regó de sensatez las -a veces- acaloradas reuniones que una misma mesa sienta a su alrededor a trabajadores, directivos y cooperativistas; sus intervenciones encabezadas con un “yo sugiero...” eran el equilibrio para llegar a consensos, buscando el punto intermedio entre posturas muy disímiles.
Al dirigir unas palabras, su hijo Ariel González Duré logró graficar, en una frase, el carácter del homenajeado: “Tal vez, él diría ‘¿no será mucho?’”. A su turno, el presidente de la Asociación de Periodistas del Departamento Uruguay (APDU), Pedro Parpagnoli, a veces con la voz entrecortada, entre otras cosas, resaltó su espíritu plural: “No tenía problemas que con la persona que trabajara a su lado no compartiera muchas ideas, era una persona amplia”. Al final, el intendente Martín Oliva recordó que lo conoció en su etapa como director del hospital Justo José Urquiza: “Saqué como conclusión el por qué lo querían tanto: su humildad, su generosidad y su caballerosidad que hay que tener en determinados momentos”.
El nombramiento de la calle fue iniciativa de la APDU, que tras presentarlo en dos ocasiones -la primera perdió estado parlamentario- logró la aprobación unánime de la Ordenanza N° 10.895, la cual asignó con su nombre a la calle 10 del Oeste Norte Bis, entre Estrada y Artusi.
Justo reconocimiento para él, que había nacido en Young (departamento Río Negro-República Oriental del Uruguay), pero que en su rol de comunicador caminó, como pocos, las calles de su ciudad adoptiva.
Padre y formador de periodistas, referencia ineludible para la comunicación en ambas márgenes del río Uruguay, socio fundador de la APDU y también murguista, Carlos Ariel González Cardozo, El Uruguayo para todos quienes lo conocían.
“De una cultura general tan vasta como lo era su generosidad para transmitirla, González Cardozo fue una de las voces más destacadas en la emisora estatal LT11. Quienes tuvimos la dicha de escucharlo en aquellos años del legendario programa ‘Vespertina’, nos encontramos con un periodista que respetaba a su público oyente y que lo consideraba inteligente... O capaz de serlo. ‘Vespertina’ (como todo lo que emprendía El Uruguayo) era un oasis de libertad en una época aun tímidamente en apertura, recién salida de la dictadura. Un espacio plural, de análisis político sensato, de entrevistas profundas, de humor inteligente y muchas veces socarrón, de música ‘que solo él pasa’. Carlos Ariel fue, en sí mismo, un multiplicador de voces, un ‘abridor’ de horizontes plurales, un generador constante de alternativas informativas y de opinión en una ciudad que, por aquellos años, carecía de alternativas”, recordó Américo Schvartzman, en una extensa nota necrológica publicada por EL MIÉRCOLES DIGITAL el día de su paso a la inmortalidad (Verla aquí).
El socio honorario de la APDU que unía grietas
Fue uno de los socios fundadores de la Asociación que nuclea a los periodistas del departamento Uruguay. Con su impronta, regó de sensatez las -a veces- acaloradas reuniones que una misma mesa sienta a su alrededor a trabajadores, directivos y cooperativistas; sus intervenciones encabezadas con un “yo sugiero...” eran el equilibrio para llegar a consensos, buscando el punto intermedio entre posturas muy disímiles. ¡Hasta lo hizo post mortem!: el 28 de junio de 2018, en una sesión ordinaria el Concejo Deliberante se prestaba a debatir un proyecto de ordenanza para declarar a la ciudad “Pro Vida”, en el marco de la discusión nacional por el aborto legal. El recinto Presidente Juan Domingo Perón estaba repleto de militantes, bien dividido entre los celestes, por un lado, y los verdes por otro. El clima estaba caldeado, con improperios para los concejales, según su postura. Al leerse el orden del día con las notas ingresadas, una de ellas fue la impulsada por la APDU para reconocerlo a Carlos con su nombre en una calle. Fue el único momento en que las partes olvidaron sus diferencias para unificar un cerrado aplauso.
La APDU, pese a su ausencia, siguió el camino que ayudó a forjar. En mejorar el ejercicio del oficio mediante capacitaciones en diferentes campos con la adaptación a los tiempos que corren, como en temáticas de género, en el tratamiento de temas sensibles como el suicidio, entre otros puntos; en la organización – que es referencia en la provincia-, de un debate cada cuatro años entre quienes aspiran a comandar la ciudad; en concientizar a los colegas y ciudadanos en que el derecho a la información pública es eso, un derecho y no un privilegio de los que ostentan el poder político, por lo que se logró una ordenanza que garantiza su acceso, aunque están luchando para realizarle modificaciones acordes a la realidad uruguayense. También esa organización sigue insistiendo desde hace más de diez años en la regulación de la pauta publicitaria municipal mediante una ordenanza (lo que fue recordado públicamente este mismo 7 de junio ante la presencia del intendente, concejales y parte de su gabinete, presentes en el acto), para que no continúe su distribución al arbitrio del Poder Ejecutivo. Para ampliar al respecto, ante cada inicio de gestión, se presentó la iniciativa y jamás tuvo tratamiento en el Legislativo de Concepción del Uruguay.
La APDU, además, tuvo otras iniciativas de reconocimiento, como la de denominar a una calle de la ciudad como ‘José Luis cabezas’, el fotógrafo asesinado por órdenes de Alfredo Yabrán en 1996. Esos son sólo algunas de las numerosas iniciativas de esa organización que El Uruguayo ayudó a impulsar.
“¿No tenía defectos el señor este?”, podría preguntarse quien lee. Y claro que sí los tenía, pero lo valioso de este rescate es resaltar las intenciones, las construcciones colectivas que militó, tal vez sin proponérselo, incluso, a lo largo de su vida.
De ahora en más, esos gurises que están en la foto de portada de esta nota (y como ellos miles más), al observar el cartel nomenclador podrán ir a los archivos periodísticos o googlear su nombre para saber que alguna vez en los medios y por las calles de esta ciudad anduvo un hombre que transmitió una forma de ser, y que estaba convencido que “la función del periodismo es formar, informar y entretener”.
Galería de imágenes. hacer click en cada una para ampliar.
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