El doctor Enrique De Michele envió a esta Redacción una carta donde plantea lo que demora, en promedio, un Juzgado entrerriano en resolver un problema judicial con la urgencia que le demandan a las obras sociales en dar respuestas a sus requerimientos.
La misiva dice lo siguiente:
Una catarata, en un Juzgado y en cualquier parte de la administración, debería demorar dos años
Tal vez así nos demos cuenta de lo denso que resulta resolver un conflicto mínimo en Argentina.
1) Cuando un/una Juez, solicita ante su entidad de servicios de salud ( Obra Social o Pre paga ) la autorización para una cirugía de cataratas ( que no es una urgencia ni requeriría la vía extrema del “amparo” ), a las 24 hs manda a buscar la autorización, y se enoja mucho si hay alguna demora.
2) Cuando el empleado que atendió administrativamente los requerimientos de ese Juez afiliado se jubila – y reclama administrativamente y vía amparo para que la Obra Social para la que le descuentan los aportes de la jubilación lo afilie y le brinde servicios, pasa más de dos años entre papeles y juzgados que le dan la razón, pero le deniegan la solución o el amparo ( por que “no es la vía apropiada” para el reclamo, aunque sí parece apropiado permitir que se eternice que le descuenten y no lo afilien ), no le devuelven la plata ( porque “este no es un ente que otorgue reintegros” de dinero, aunque sí los retenga por ley ), ni lo afilian o brinden servicios, aunque reciban el dinero retenido ( porque “no tenemos obligación de afiliarlo” ).
Una “catarata”, en un Juzgado, en la dirección de una Obra Social, y en las Cajas de Jubilaciones, debería demorar dos años en ser autorizadas, a ver si la Justicia y la administración pública, se dan cuenta de su parsimonia exasperante, y se ponen a tiro de los problemas y soluciones que exigen los habitantes normales de este castigado país.
Atte.
Dr De Michele Enrique
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