Este miércoles los intendentes tendrán una reunión en Concordia con el gobernador Sergio Urribarri para analizar la instrumentación del decreto que faculta a la Policía a efectuar controles de motos en todo el territorio provincial. En Concepción del Uruguay hubo fuertes cuestionamientos a la manera de aplicación.
“Tomamos la decisión de actuar en protección de la vida y de la libertad y lo hicimos”, resaltó el Gobernador al dar cuenta de los resultados que arrojó hasta el momento la puesta en marcha del decreto Nº 2675 que faculta a la Policía a efectuar controles de motos en todo el territorio provincial.
“Cada moto con algún elemento visible fuera de la reglamentación en el vehículo o en el conductor es detenida y retenida hasta que se demuestre su propiedad o se salve el problema", dijo el gobernador Sergio Urribarri este lunes tras encabezar un encuentro con la cúpula policial de la provincia.
"Con esto hemos logrado la reducción drástica de los arrebatos cometidos desde las motos y al mismo tiempo una disminución notable de los accidentes de tránsito por la reducción de la circulación y porque quienes hoy circulan en moto lo hacen con casco protector. Estamos muy satisfechos por la medida y por los resultados”, añadió Urribarri, que estuvo acompañado por el vicegobernador José Cáceres.
DATOS
El 12 de septiembre comenzó a implementarse en la provincia el decreto 2.675 que faculta a la Policía a realizar operativos de control de motos en toda la provincia.
A casi 40 días de la puesta en marcha de este nuevo sistema los accidentes se redujeron a la mitad y los hechos delictivos cometidos por motochorros disminuyeron casi el 80 por ciento, según los registros que los equipos de salud y seguridad le acercaron a Urribarri.
Hasta este lunes se retuvieron 5.542 motos y se labraron 6.865 actas de infracciones en toda la provincia.
Por ejemplo, en Paraná, durante el mes de agosto se registraron 222 accidentes, de los cuales 156 corresponden a lesionados por motos. En tanto que a la primera quincena del mes de octubre, ese número disminuyó a 16, lo que refleja el fuerte impacto notable que ha tenido la medida.
Tal disminución además impacta sobre la redistribución del gasto en el hospital teniendo en cuenta que alrededor de seis mil pesos es el costo promedio de un día de terapia intensiva.
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